O no...
Un mexicano y su perro dormitando en la puerta de una cantina (poncho y gorro sobre la cara...).
Pasa una liebre corriendo y levantando el polvo de la calle...
A la media hora, el perro abre un ojo y, con acento mexicano (muy importante), ladra
"¡GUAU!"A la hora, el mexicano levanta levemente el gorro y le espeta al perro
"¡Tranquilo, Rayo!" O no...