Total y absolutamente de acuerdo con el decálogo
No tanto con la carta, que me parece que mete en el mismo saco muchos conceptos y mezcla algunas cosas bajo mi punto de vista.
En mi humilde opinión el argumento es tan simple como que no se puede criminalizar a los que usamos redes de intercambio p2p, como tampoco se puede criminalizar a los que usan palanquetas sin saber qué se hace con ellas.
El debate de la copia privada y su intercambio en esas redes es secundario. El argumento de verme primero una copia bajada por internet para decidir si voy a verla al cine me parece bastante peregrino (al margen de si es legal o no).
Un saludo